Matías Dorrego / Ramón Sanmiguel (N. 1840)
El padre biológico de Adriana. A los 24 años tuvo un fugaz amorío con Amelia Santalla, fruto del cual nació nuestra protagonista. Matías embarca para Cuba dejando atrás a una amante arrepentida, que decide no cometer la locura de seguirle y convence a Enrique Castro de que la despose y le dé su apellido a su hija. Cuando éste, en su lecho de muerte, le confiesa a Adriana el secreto de su origen, provoca en ella un shock de incalculables consecuencias que le hace tomar la decisión de viajar de inmediato a la isla para pedirle cuentas a su padre de “porqué abandonó a su madre y la abandonó a ella”. El encuentro se hace esperar, pero cuando se produce generará en ellos emociones insospechadas y profundas. Con un turbio pasado a sus espaldas, Matías, ahora renacido en la identidad de Ramón Sanmiguel, sufre una sacudida total al conocer a su hija y ya su vida no será igual. “Un hombre sano, de cincuenta y cinco años, solo, sin descendencia ni familia cercana, no se preocupa de sus postrimerías. Pero ahora tengo una hija y un nieto, y eso le da a todo un sentido de urgencia y crea ciertas obligaciones».